¿Tienes un coche eléctrico? Guía de los problemas que podrás tener en invierno

El invierno se presenta, y si eres dueño de un vehículo eléctrico, prepárate para superar obstáculos más allá de la tarea de raspar el hielo del parabrisas. Esta temporada invernal trae consigo desafíos particulares, especialmente si eres recién llegado a la movilidad eléctrica. Aquí te brindamos una detallada guía para enfrentar con confianza los problemas invernales.

1. Navegando el Frío y sus Efectos en la Autonomía Eléctrica: ¿Cómo Afecta el invierno a tu Viaje?

Experimentarás una disminución en la autonomía de tu vehículo eléctrico durante los días más fríos. Las pruebas indican un aumento del 21,9% en el consumo de energía en invierno, impactando tanto la autonomía de la batería como el rendimiento general del vehículo. Considera esta adaptación estacional al planificar tus desplazamientos.

2. Climatización a Toda Marcha: un Derroche de Energía ¿Cómo Afecta el invierno a tu Viaje?

Arrancar tu vehículo eléctrico en invierno también puede ser todo un reto energético.

 Imagina subirte a un vehículo que estuvo estacionado durante toda una fría noche de invierno. Ahora, subir esa temperatura hasta unos agradables 20 o 22 grados requiere un esfuerzo extra de la batería que no teníamos previsto en verano. 

La solución: precalienta el interior mientras aún está enchufado. Programa la calefacción desde la pantalla del vehículo o tu móvil para un arranque eficiente.

3. La Batalla de la Calefacción: Combatiendo el Frío y la Reducción de Autonomía

Una vez en marcha, la calefacción se convierte en una aliada del frío, pero también una enemiga de la autonomía. Encender y apagar la calefacción tiene un impacto inmediato en la autonomía potencial. Así que, si quieres mantener esos cálidos 22 grados en el interior, prepárate para ver cómo los kilómetros indicados descienden.

 Una alternativa ingeniosa es confiar en la calefacción de asientos y volante que muchos modelos eléctricos ocupan, aunque evidentemente no es la misma sensación. 

4. Cargar en Frío: Mejor Temprano que Tarde

El problema está en que las baterías cuando están frías reducen su capacidad para aceptar carga.

Por lo que, si estacionas tu vehículo por la noche con poca batería y pospones la recarga para la mañana siguiente, prepara tu paciencia.

Recargar el batería justo después de usar el vehículo es lo mejor que puedes hacer en invierno.

5. Ten cuidado con los frenos

La oxidación de los discos de freno se suma a la lista de preocupaciones invernales.  La sal y el polvo en las calles causan este problema debido a que su acumulación es debido al poco uso que se les da a los frenos en estos vehículos.  

Para evitar sorpresas desagradables, no te olvides de hacer un mantenimiento de vez darles uso a los frenos de vez en cuando, además de realizar un lavado a presión mensual en la zona interior de las llantas. Tus frenos te lo agradecerán.

6. Deslizamiento Peligroso 

El sexto problema entra en juego cuando intentamos frenar en un terreno complicado. La función one pedal, que proporciona una fuerte deceleración al levantar el pie del acelerador, puede causar el bloqueo de las ruedas sobre nieve o hielo. La solución es simple: desactiva el one pedal en condiciones climáticas extremas. Encuentra el botón correspondiente en la pantalla o en el volante y mantén el control sobre la situación.

7. Aceleraciones Instantáneas

Las mecánicas eléctricas responden al instante, y eso puede jugar en tu contra sobre firme húmedo o con lluvia. La pérdida de tracción, aunque breve, puede llevarte a perder el control momentáneo del vehículo.

Así que, ten cuidado al acelerar, especialmente en curvas y terrenos resbaladizos.

8. Neumáticos: Más Peso, Menor Duración

Los vehículos eléctricos, al ser un poco más pesados, pueden poner más desgaste en tus neumáticos. Especialmente en en días de lluvia o nieve, unos neumáticos gastados son como caminar sobre hielo. Asegúrate de revisar la profundidad del dibujo y mantener la presión adecuada para poder enfrentar el terrreno.

9. Neumáticos de Baja Resistencia: Un Dilema en invierno

Sigamos hablando de neumáticos, pero ahora hablemos del dilema de la baja resistencia a la rodadura. Estos neumáticos, que son geniales para ahorrar energía, pueden ser un poco resbaladizos cuando las temperaturas bajan. Así que cuida tus neumáticos y ajusta las tracciones cuando estaciones en lugares complicados. No queremos que tu auto patine como en una pista de hielo.

10. Mantenimiento Regular: El Cariño que tu Vehículo Merece

Los vehículos eléctricos son más sencillos en mecánicamente, sin embargo, aún necesitan un poco de cariño.

Al igual que cualquier otro vehículo, siguen teniendo líquido de frenos, aceite de transmisión, depósito de lavaparabrisas y líquido de dirección.

Por lo que es importante revisarlo ocasionalmente para que puedas seguir disfrutando tu vehículo.